Por José Opazo, Departamento Comunicacional.
El martes 2 de abril y con motivo del Día Mundial del Autismo, la División de Sanidad realizó el conversatorio online “Hablemos de Autismo”, instancia para crear conciencia y visibilizar a las personas con esta condición, reuniendo a especialistas en la materia junto con Aviadores Militares con hijos diagnosticados dentro del Espectro Autista, quienes intercambiaron experiencias e informaron sobre los beneficios y recursos con los que cuenta la Institución para todo el personal, tanto militar como civil.
La instancia se efectuó en dependencias de la Academia de Guerra Aérea, hasta donde llegó la psicopedagoga y especialista en TEA Fernanda Chomalí, junto al Comandante de Escuadrilla (I) Mauricio Figueroa y el Sargento 2° Gonzalo Bravo, ambos padres de niños con autismo. De manera telemática se contó con la participación de la doctora en neuropediatría Claudia Vásquez y la empleada civil Eugenia Cea, abogada de la División de Bienestar Social y madre de un niño dentro del espectro.
En poco más de una hora, los participantes pudieron compartir sus experiencias personales y familiares enfrentando la condición de sus hijos, teniendo también la mirada clínica y experta sobre los síntomas y el diagnóstico temprano. En esa línea, la psicopedagoga Fernanda Chomalí comentó que esto resulta fundamental. “A contar de los 18 meses ya se pueden empezar a identificar los síntomas más tempranos, como lo puede ser un retroceso en el habla o una molestia ante ciertas texturas de alimento. Mientras antes se detecte, se puede empezar a trabajar en terapias cuando el cerebro aún está en desarrollo y es mucho más maleable”, indicó.
En cuanto a los testimonios y el proceso de diagnóstico, el Comandante Figueroa afirmó que uno de los principales puntos de partida es quitar los prejuicios iniciando en la familia. “Hay mucho desconocimiento sobre este trastorno, pero antes de pedir a otros que acepten la condición de un hijo, es la familia la que tiene que tomar conciencia y quitarse los prejuicios. Muchas veces nosotros empezamos a limitar a los niños cuando ellos tienen toda la energía y ganas por conocer el mundo”, afirmó el Oficial.
Por otra parte, el Sargento 2° Bravo hizo hincapié en el apoyo que requieren los padres en este proceso. “Los padres muchas veces nos sentimos desorientados, no sabemos a quién acudir, qué tratamiento implementar y una vez que empiezas una terapia, semanalmente son unas dos o tres sesiones y con distintos médicos, no hay bolsillo que aguante. Sin embargo, la Fuerza Aérea tiene mecanismos de apoyo que han significado un verdadero alivio y una luz de esperanza”.
En esa misma línea, la actividad finalizó convocando a los interesados a unirse a Abrazos Azules, la primera red de apoyo para familias FACH que se ven afectadas por esta condición, instancia que busca ser un punto de encuentro para compartir experiencias e información sobre cómo abordar el desarrollo de los niños, siendo también un canal de comunicación con la Institución. Los interesados pueden comunicarse al correo fach.abrazosazules@gmail.com.