Por Capitán de Bandada (SG) Celeste Aller – fotógrafo Claudio Pérez, Departamento Comunicacional.
A las 13:30 horas del martes 8 de mayo, la Fuerza Aérea de Chile efectuó la primera operación aérea para el Ejercicio Cooperación IX, la que consistió en el traslado de 10 toneladas de carga simulada de productos de primera necesidad como agua, material de abrigo y alimentos, empleando un avión C-130 Hércules del Grupo de Aviación N°10, que se dirigió desde la Base Aérea del Callao, en Lima, hasta la Escuela de Formación de Pilotos N° 51 ubicada en Pisco, lugar donde se centralizó la ayuda humanitaria.
De esta manera se pudo ir en ayuda de los habitantes de la zona que se vieron damnificados por un terremoto simulado que afectó a la región sur del país.
El Jefe de Tarea del Ejercicio Cooperación IX, General de Brigada Aérea (A) Andrés Leiva Divasto señaló que “esta primera operación aérea ha sido realizada sin contratiempos, demostrando que el proceso de planificación de las actividades desde antes que comenzara el Ejercicio fue bien desarrollado. Asimismo, quiero destacar el compromiso de nuestra agrupación por efectuar sus actividades de forma profesional, lo que enaltece el nombre de nuestra Institución”.
En tanto el Comandante de la aeronave C-130, Comandante de Grupo (A) Carlos Castro, se refirió a la misión afirmando que “durante este día hemos efectuado una importante misión que se sumará a las realizadas por otras fuerzas aéreas americanas en el sur de Perú, para ir en ayuda de personas damnificadas por el gran terremoto ocurrido recientemente, por lo que se dispuso que en Pisco se centralizara la ayuda humanitaria para ser distribuida en helicópteros de la Fuerza Aérea del Perú para su correspondiente distribución”.
La Fuerza Aérea ha desarrollado el concepto de polivalencia, que consiste en disponer de las capacidades de defensa para contribuir al desarrollo nacional y para ir en apoyo de la comunidad, tanto nacional como internacional, en situaciones de catástrofe y emergencia.
Es importante señalar que la participación de la Fuerza Aérea en este tipo de ejercicios permite incrementar las experiencias en el empleo del poder aéreo en un escenario de desastre o catástrofe natural, operando bajo metodología y procedimientos del Sistema de Cooperación de las Fuerzas Aéreas Americanas (SICOFAA), junto con aumentar la interoperabilidad entre las Fuerzas Aéreas Americanas participantes, además de intercambiar experiencias y conocimientos operacionales con las unidades de vuelos y de planificación extranjeras.
