La Estación Polar Científica Conjunta “Glaciar Unión”, está ubicada a 6.000 kilómetros de Santiago, a 3.000 km de Punta Arenas y tan sólo a 1.000 kilómetros del Polo Sur. Para acceder a esa profundidad del territorio antártico es fundamental el empleo del medio aéreo. Para alcanzar dicha profundidad del territorio antártico, dos aeronaves C-130 Hércules de dotación del Grupo de Aviación Nº 10, de la IIª Brigada Aérea, vuelan durante 6 horas desde Punta Arenas al Glaciar Unión aterrizando sobre una pista de hielo de 3.000 metros de longitud. Transcurridas unas horas en el lugar y una vez que se realizan las faenas de descarga y repostaje de combustible de los aviones C-130 Hércules, se inicia el regreso de los aviones que considera otras 6 horas de vuelo hasta arribar a la Base Aérea Chabunco, en la IVª Brigada Aérea, en Punta Arenas.
Al mismo tiempo, en Glaciar Unión se encuentran operando con sus respectivas tripulaciones aéreas 2 aviones DHC-6 Twin Otter, medios de transporte liviano de la Institución que recorrieron 1.238 kilómetros desde Punta Arenas a la Base Aérea Antártica Presidente Frei, luego volaron hasta la Base Inglesa Rothera ubicada a 777 kilómetros de Base Frei y posteriormente se desplegaron hasta el sector del Glaciar Unión después de recorrer otros 1.425 kilómetros aproximadamente. En la Estación Polar Conjunta, estas aeronaves cumplen la importante misión de trasladar a los investigadores científicos y su respectivo equipamiento a las zonas de las investigaciones. Además de efectuar funciones de alerta en caso de ser requerida una evacuación aeromédica y su principal función de efectuar cobertura para operaciones de Búsqueda y Salvamento Aéreo SAR.
Se trata de la quinta reapertura de la Estación Polar Científica Conjunta “Glaciar Unión”, por parte de nuestro país, lo que ha requerido que se empleen al máximo las capacidades de las tres instituciones armadas, incluyendo tripulaciones aéreas, mecánicos, aeronaves y una Unidad de Exploración Terrestre Antártica (UETA). La presente misión considera tres etapas: despliegue, activación, y repliegue. La primera consistió en el traslado de la dotación, el despliegue logístico, la instalación de las bases en el sector y la apertura del campamento que incluyó desenterrar el domo central. En tanto, la segunda etapa de activación, se concretó el día viernes 26 de noviembre, con el arribo al lugar de material logístico y de los científicos de INACH.
La misión asignada a la Institución es ejercer el mando y las coordinaciones necesarias para activar y operar la Estación Polar Científica Conjunta, así como también trasladar al personal de Ejército, Armada, Fuerza Aérea, Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y de científicos del Instituto Antártico Chileno (INACH), quienes realizarán las investigaciones en el sector, como también la de integrar con personal especialista la dotación que activará la Estación.
Hasta este momento se han concretado 4 vuelos en material C-130 H, que representan 48 horas de vuelo, 34 personas trasladadas y un total de 17.108 kilos de carga transportados, cada una de estas operaciones, considera la participación de 2 aeronaves de transporte pesado. En tanto los aviones DHC-6 Twin Otter, han recorrido hasta la fecha más de 3.500 kilómetros, empleando para ello, cerca de 35 horas de vuelo.
Según lo expresado por el Comandante en Jefe de la IVª Brigada Aérea, General de Brigada Aérea (A) Miguel Stange Muñoz “la FACh cumple la misión fundamental de mantener una conectividad aérea permanente con Glaciar Unión, asegurando la supervivencia de la dotación conjunta y brindando el apoyo operacional y logístico que sustenta el funcionamiento de la Estación Polar, acción que contribuye a potenciar la presencia nacional en territorio antártico y al desarrollo de ciencia avanzada en la profundidad de dicho continente”.
Esta nueva operación aérea antártica por parte de la Fuerza Aérea de Chile, es uno de los hitos más importantes a nivel nacional, ya que permite la apertura de los espacios menos explorados para el desarrollo de ciencia antártica, otorgar cobertura SAR para quien lo requiera y asistencia en evacuaciones aeromédicas y a la vez demuestra el nivel de entrenamiento de las tripulaciones aéreas y las excelentes capacidades de los medios aéreos polivalentes de la Institución más allá de sus naturales funciones en el ámbito de la Defensa.
La operación al sector de Glaciar Unión se considera una operación de largo aliento dado el esfuerzo material y humano que implica acceder y operar en el sector, teniendo a la vista que son muy pocos los países que tienen la posibilidad de acceder en forma directa desde el continente americano.
Finalmente, comprender que para acceder a la profundidad polar el medio aéreo es fundamental para arribar a la zona y luego sostener la capacidad para operar y mantenerse en el sector, sin lugar a dudas, son desafíos no menores y es ese el rol fundamental de conectividad que cumple la Fuerza Aérea en su contribución al quehacer antártico nacional.